Los lápices de Faber-Castell, totalmente acuarelables, crean una simbiosis perfecta con el pincel. El pincel transforma líneas trazadas toscamente en transiciones suaves en cuestión de segundos.
Veladura
La veladura agrega una profundidad controlada al dibujo capa por capa. Cada capa de color debe secarse antes de aplicar el siguiente. Las capas de color dejan ver los colores de debajo y se mezclan con ellos de forma óptima.
Lavado · Mojado sobre mojado
En estas dos técnicas se emplean cantidades de agua muy generosas. Los colores fluyen y se mezclan de forma artística y sin control. En la técnica de lavado, se aplica la pintura sobre papel seco, mientras que en la técnica de mojado sobre mojado, se moja el papel con agua limpia
antes de aplicar la pintura para que los colores se corran aún más.
Granulación
La pintura se aplica superficialmente usando un pincel casi seco, de modo que los pigmentos se quedan en la capa superior del grano del papel. Para esta técnica se necesita una superficie estructurada del papel.
Esta técnica puede lograrse con lápices acuarelables y con acuarelas convencionales (en tarro o en tubo).
Salpicaduras de color
Se pueden usar las salpicaduras de color para crear una sensación de ligereza en las obras de acuarela. Para esta técnica, se pasa la punta del pincel por la mina del lápiz de color en movimientos cortos ascendentes y descendentes, para que la pintura salpique directamente
sobre el dibujo. Es posible conseguir resultados distintos si se varía la cantidad de agua y la distancia del dibujo.
Técnica de raspado
La tapa tan sofisticada ofrece una interesante variedad de opciones de diseño.
Con el lateral con forma de cuña de la tapa, se puede desplazar la pintura disuelta por el papel para crear estructuras poco corrientes, como con cuchilla.
Con el lateral con forma de cuña de la tapa, se puede desplazar la pintura disuelta por el papel para crear estructuras poco corrientes, como con cuchilla.
Técnica de lijado
Las estrías integradas en la tapa son perfectas para conseguir efectos creativos. Es posible lijar el papel mojado para añadir puntos de luz al dibujo, con líneas de distintas formas.